¿Cómo funciona un circuito eléctrico?

La electricidad se ha convertido en una parte fundamental de nuestro trabajo diario. Actualmente, no hay industria o empresa que no utilice la energía para poder brindar sus servicios o para fabricar sus productos.

Por esta razón, es crucial conocer un poco sobre el proceso de transmisión de corriente que le permite a nuestros dispositivos funcionar. En este artículo te mostraremos cómo funciona un circuito eléctrico.

¿Qué es un circuito eléctrico?

Lo primero que tenemos que saber, es que un circuito eléctrico es la combinación de dos o más componentes que juntos forman un lazo cerrado que permite que la corriente eléctrica fluya a través de ellos y puede ser manipulado por las manos de ciertos expertos.

Algunos ejemplos de este tipo de sistema podrían ser interruptores, condensadores, semiconductores y cables; los cuales, funcionan juntos para permitir que la corriente fluya a través de ellos para hacer que nuestros dispositivos funcionen.

Para cumplir su cometido de producir energía lumínica, energía térmica o cinética, el circuito eléctrico, que es un sistema cerrado con un único recorrido por el que avanza la corriente. Funciona mientras los electrones estén en constante movimiento, la energía se generará continuamente. Solo se les puede detener si se destruye su camino o se agota su fuente de energía.

Cuando hablamos de algo que interrumpe el camino o funcionamiento de un circuito eléctrico, nos referimos al instante en que un circuito cerrado se convierte repentinamente en uno abierto, cortando el suministro de energía. Esto podría suceder, por ejemplo, si la luz se apagara accionando el interruptor.

Funcionamiento de los circuitos eléctricos

La transmisión de energía mediante el movimiento de electrones a través de un conductor es lo que llamamos electricidad. Cuyo viaje comienza desde las centrales eléctricas y otras infraestructuras encargadas del suministro. Es aquí donde se genera, utilizando baterías especiales para darle poder a la red eléctrica pública, donde se distribuye a nuestros hogares.

Cuando se enciende el interruptor, los circuitos eléctricos en su interior se activan. Una resistencia es un componente que permite que los electrones fluyan a través de ella. Esto permite que la electricidad viaje desde la fuente de alimentación hasta la carga.

El término "circuito cerrado" se usa para describir un sistema en el que la corriente eléctrica fluye ininterrumpidamente de un punto a otro. Mientras que el término "circuito abierto" se emplea para describir un sistema en el que la corriente fluye ocasionalmente. Pero cuando se rompe una conexión en un circuito eléctrico, se interrumpe el flujo de electricidad.

Componentes principales de este tipo de sistema

Ya vimos anteriormente que un circuito eléctrico puede mover electrones y generar energía, pero ¿qué partes constituyen un sistema de este tipo?

Fuente de energía o generador

El generador, también conocido como fuente de alimentación, es el componente de un circuito eléctrico que genera y suministra electricidad al sistema. Como tal, será el encargado de suministrar el "impulso" que permite a los electrones moverse a lo largo del circuito, donde pueden convertir la energía mecánica en eléctrica. Cabe mencionar, que un generador es una pieza fundamental en una gran cantidad de dispositivos.

Una batería, que tiene una terminal positiva y otra negativa, es un tipo común de generador. Para demostrar cómo funciona un circuito eléctrico, conectamos la terminal negativa a la positiva. Podremos notar que los electrones conseguirán moverse libremente por el sistema, compensando la pérdida de energía en el camino.

Conductor, una pieza fundamental en los circuitos eléctricos

Cada electrón sigue un camino específico dentro del circuito eléctrico, pero el material por el que pasa puede cambiar según el diseño del mismo. Sin embargo, el cobre y el aluminio son los materiales internos más frecuentes en los cables que transportarán la energía.

Para maximizar la eficiencia de un circuito eléctrico, la mayoría de los cables están hechos de cobre o aluminio, que son excelentes conductores de electricidad y tienen baja resistencia a este elemento. Permitiendo que los dispositivos funcionen de manera extraordinaria con la energía que requieren para arrancar su mecanismo.

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